Iniciativa del Poble Valencià-Compromís ha celebrado esta mañana en Alicante, en la sede de CCOO, reunión de su Mesa Nacional en la que, entre otras cuestiones, se ha avanzado en la elaboración de la estrategia y acción electoral de cara a los comicios que se afrontarán en 2023. Los portavoces, Aitana Mas y Alberto Ibáñez, han sido los encargados de presentar el informe de la situación política y moderar el debate en los diferentes puntos del orden del día.
En la semana del 25N los portavoces han querido incidir en como “la lucha contra el machismo y por el derecho en la vida, la igualdad y la libertad de las mujeres es nuestra prioridad. Por eso, a pesar de que queda mucho para hacer, tenemos que poner en valor los hitos conquistados. Particularmente, el Pacto Valenciano contra la violencia de género y machista. Un acuerdo de país histórico que, en un escenario de crispación y aumento del negacionismo, ha conseguido poner de acuerdo al conjunto de la sociedad valenciana. 5 años de trabajo y liderazgo que ha permitido que el 94% de las casi trescientas medidas estén realizadas y en marcha”.
Desde Iniciativa-Compromís se reivindica el cambio radical de cómo se afronta desde los gobiernos la situación actual post-pandemia, con la invasión de Ucrania y la crisis inflacionista, respecto a la gran recesión de 2008. “En este contexto es fundamental defender la democracia sin cálculos electorales a corto plazo, apostar por una democratización de la economía que nos permita ganar soberanías, hacer pedagogía feminista basada en el respecto de los derechos humanos, la cultura de la paz y el desarrollo comunitario”, han asegurado Mas e Ibáñez.
Desde la formación ecosocialista se ha incidido en que hay que apelar al electorado que prefiere la abstención porque está desencantando o considera que independientemente de quien gobierne las cosas siempre van bien para los mismos y mal para sus barrios. Hay que hacer pedagogía en como la banca está en beneficios históricos que superan los de 2007 y las grandes eléctricas el mismo. Mientras que la mayoría de las familias se han empobrecido. Por eso se han aprobado reformas fiscales que van encaminadas a qué quienes más acumulen paguen más y aligerar la carga a las familias. Sin embargo, aquí hay una diferencia sustancial, entre el PSOE que, después de haberse resistido, quiere que los nuevos impuestos a los ricos sean temporales o, incluso, como el PSPV que quiere subvencionar a las familias más ricas ampliando las deducciones a empresas que facturan más de 10 millones de euros. “Sin duda, combatir la desigualdad con una fiscalidad justa y mecanismos de democratización de la economía tiene que continuar siendo nuestra prioridad”.
También, por ejemplo, hemos propuesto, sin éxito por ahora, que las administraciones públicas que financien de forma estable, con muchos millones de euros, a grandes empresas puedan convertir esta inversión en accionariado. Reformas fiscales que incluyen, por primera vez, la perspectiva verde, la posibilidad de disponer de una tasa turística y el estrechamiento de la brecha de género con la bajada al 4% de los productos de salud menstrual.
A parte de la fiscalidad justa, hay que reivindicar la importancia de los derechos sociales desplegados mayoritariamente por el Botánico, remarcando sobre todo la importancia de la renta valenciana de inclusión con un presupuesto diez veces mayor que en 2015. Sin embargo, desde Iniciativa-Compromís se lamentan los impedimentos para regular el precio de la vivienda que enturbian los avances en protección social.
“La regulación y control de los precios del alquiler, como se hizo con las mascarillas o test de antígenos durante la pandemia o ahora con el precio de la luz por la crisis energética, tiene que ser una prioridad en nuestra agenda. Mientras tanto, desde el Botánico, y muchos gobiernos locales, se ha avanzado ampliando el parque de vivienda pública (el 40% para personas jóvenes) o ampliando las ayudas al alquiler social (casi 25 millones de euros)”.
El fortalecimiento de los servicios públicos y el avance hacia su universalización es otro de los hitos de los presupuestos de 2023 de la Generalitat. Particularmente, hay que destacar, la educación de 0-3 años, las becas comedor y de transporte, xarxallibres para bachillerato, las becas universitarias y de FP así como la bajada de tasas, la consolidación de las prestaciones sociales y el sistema de atención a la dependencia, fortalecimiento de la atención primaria y salud mental, la universalización de la vacuna del papiloma humano, la incorporación al Sistema Nacional de Salud de las mamografías desde los 40 años a propuesta de nuestro senador, apoyo al deporte base y democratización cultural, la recuperación de la gestión de las ITV’s, etc. También, conjuntamente con el Estado, se ha ampliado la gratuidad del transporte público. Una medida muy importante para los bolsillos de las familias trabajadoras y el estudiantado, pero que tiene que mejorar su implementación tanto en clave externa (más frecuencias y mejores equipaciones) y en clave interna hay que paliar la infrafinanciación sobre todo del transporte metropolitano.
Desde Iniciativa-Compromís se pone en valor unos presupuestos que también avanzan en la transformación del modelo económico del País Valenciano con una mirada verde, feminista y de alto valor añadido. En este sentido, hay que apuntar la inversión de casi 50 millones de euros, para homologar los salarios de los y las trabajadoras del sector de servicios sociales con el funcionariado. Una medida que impacta a más de 12.000 trabajadoras.
Finalmente los portavoces han destacado la apuesta por la transición ecológica para ganar soberanía alimentaria, energética y bienestar para la mayoría con una fuerte inversión. También, hay que resaltar la tarea de apoyo al campo valenciano en el senado con dos grandes hitos. Hemos conseguido democratizar la gestión de los fondos europeos de la PAC para que sirvan para ayudar a los pequeños agricultores valencianos a adaptarse a las nuevas normativas de seguridad y respeto medioambiental. Y hemos hecho rectificar al gobierno español que había prohibido las quemas agrícolas lo que pone de manifiesto el desconocimiento absoluto de la realidad valenciana. Además, para combatir la emergencia climática y acontecimientos climáticos extremos, hay que destacar la subida histórica de un 42% en prevención de incendios.