Compromís ve sorprendente el trato dado por el Consell a pesar de la gravedad del caso.
En julio de 2012, los agentes medioambiental de Sant Mateu emitieron un informe respecto a las inspecciones hechas a la exposición de animales (cetrería) que se hacía todos los veranos en el interior del Castillo de Peñíscola, y en ella, se denunció que además de no tener los preceptivos permisos como “ parque zoológico”, se tenía a una serie de aves silvestres con alto grado de protección sin cumplir con la normativa específica. Después de esa inspección, los agentes también fueron a una finca propiedad de esta persona, y descubrieron un gran número de animales protegidos, lugar en el cual tampoco tendría ninguna licencia como parque zoológico. En ninguna de las aves de la exposición dentro del castillo, consideradas como protegidas en la Comunidad Valenciana se le localizó el preceptivo microchip identificativo que establece la Disposición Adicional Primera.2 del DECRETO 21/2012, de 27 de enero, del Consell .
Ahora, después de meses exigiendo al Consell aporte la documentación, por fin la diputada autonómica de Compromís, Mònica Oltra, ha tenido acceso a los escritos oficiales y se sabe que la sanción que se le impuso fue de 60.101 euros al considerarse un hecho muy grave.
Esta persona F.O. , que al mismo tiempo era el cetrero contratado por Aerocas para asustar a la fauna silvestre del aeropuerto de Castelló, presentó un recurso de reposición que obviaba completamente la actividad que ocasionó la inspección ( la del Castillo de Peñíscola) y la posesión de aves protegidas por directiva europea sin anillar, y simplemente se acogió a que la finca privada no podía ser entendida como un parque zoológico al no acreditar tener un horario de visitas al público. La Secretaría Autonómica de Agricultura, Pesca y Alimentación, también obvia el caso del Castillo de Peñíscola, y da la razón al recurso del propietario de estos animales, y esta anulación de la sanción, se firma en 18 de junio de 2013, martes, y justamente esa semana, el viernes día 21 es cuando se interviene e imputa a esta persona, por un delito de contrabando de especies protegidas y falsificación de documentos y certificados, y se intervienen precisamente 123 animales que los agentes ambiental certifican en 2012 había en la finca; águilas, búhos, halcones, o llinces todos ellos de especies altamente protegidas.
Precisamente en verano de 2013, se había vuelto a revisar la exposición de cetrería del Castillo de Peñíscola por parte de los Agentes Medioambientales, y se habían vuelto a encontrar infracciones similares a las de 2012, por lo cual existe una segunda denuncia que se está instruyendo.
Esta actividad irregular se venía repitiendo desde 2007, y a pesar de las inspecciones de los Agentes Medioambientales, y estar vulnerando la legislación autonómica, estatal y europea, nunca se ha sancionado al empresario, imputado después en delitos muy graves de tráfico de animales exóticos y protegidos; la sanción de 60.000 euros impuesta en 2012, fue suspendida por un recurso sin consistencia.
A pesar de no estar sancionado, siguiendo las instrucciones del Juzgado de primer instancia 3 de Castelló, en 11 de julio de 2013 se resolvió en contrato subscrito en 16 de julio de 2012 para el control de la población de la fauna del aeropuerto de Castelló.
Resulta sorprendente, después de ver el expediente que se abre, y el recurso que presenta, como la administración le quita la sanción, a pesar de continuar con las actividades de manera irregular, y justamente, se le perdone la sanción días antes de que sea imputado por la Guardia Civil. Ya era sorprendente el convocar un concurso público y asignarle un contrato por tres años por más de 90.000 euros más IVA al año a un cetrero, que trabajó asustando conejos y en un aeropuerto que no funcionaba, quizás la comentada relación del empresario propietario de “Arte Halcón” con ciertas esferas del PP provincial daría muchas pistas.