No hemos de tener miedo a la ciudadanía, nunca. Tenemos que conseguir que la gente se sienta partícipe de las decisiones tomadas por los representantes escogidos democráticamente, sólo así el consenso sobre el modelo de ciudad que quiere la mayoría, podrá ser amplio e inclusivo.
Facilitar información a los ciudadanos sobre la responsabilidad y remuneración del personal administrativo que nos atiende, realizar consultas populares vinculantes en determinadas contrataciones o de modelo de ciudad, poder acceder con facilidad a los contratos públicos, dotar el consistorio de un tipo de defensor del ciudadano (nombrado por la oposición) para resolver casos de mala praxis, etc, serían medidas de implementación sencilla y de un efecto inmediato sobre la gobernabilidad de la ciudad.
Todas las iniciativas encaminadas a darle la palabra a las ciudadanas y ciudadanos garantizarán la democracia en el ámplio sentido de la palabra, facilitarán la regeneración y fortalecerán la idea de una localidad moderna, de vanguardia, sostenible y que fomenta la convivencia. Votar cada cuatro años a los representantes políticos tiene que quedar superado, tiene que ser un factor secundario, dado que entre todas y todos tendremos la oportunidad de favorecer, de consensuar, la visión de ciudad que tenemos en mente.
Las vecinas y vecinos de una localidad como Castelló tienen que sentir la ciudad como suya y la única manera es poniendo a su alcance todos los mecanismos de participación, control y fiscalización que necesitan, elevando la transparencia hasta cotas inimaginables a día de hoy; tratamos a la gente como personas responsables, que el pueblo seguro que no nos decepcionará.
Verónica Ruíz. Iniciativa del Poble Valencià . Candidata a la lista de Compromis por Castelló.